Es viernes,
Llego a casa, me cambio rápidamente, me visto de romano, el culotte, la cazadora, las llaves, el gel ("paporsiacaso"), el móvil, zapatillas, casco, el agua, las gafas, los guantes.... la bici... buffffffffff no voy a a llegar, otra vez me toca pegarme la paliza para llegar al punto de encuentro a tiempo, y encima me pica la garganta, pero tengo tantas ganas... necesito coger la bici y desconectar para olvidarme de todo lo de esta semana. La fiebre?, da igual... creo que el termómetro no marcaba fiebre, menos mal.
Clack, clack, los pedales entran y bajo las gafas mi mirada se pierde en el asfalto. Llego más justo que justo, todos salimos con ganas, ya no se habla de trabajo, ni se oye teclear, ya sólo importa la diversión y las ganas de vivir.
Se acabó la oscuridad, el nuevo mundo se abre ante mi y el fin de semana comienza, reviviré de nuevo, respiraré de nuevo, tan sólo queda disfrutar!.
Un abrazo
Toño
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