Sigue lloviendo

Y sigue lloviendo...

 

Ya son casi doce horas las que ha llovido en nuestra Zaragoza y no tiene mucha pinta de que vaya a parar este aguacero. Ya desde el jueves pasado (día en que se hizo la foto de arriba), cuando nos cayó el diluvio universal volviendo de Torrubia, como alma que lleva el diablo, pensando que así nos mojaríamos menos, el líquido elemento no ha parado de jod... digo... molestar!. El viernes en blanco, ayer casi casi... y hoy un poquico de rodillo. Como sigamos así vamos a tener que dedicarnos a las tabas, porque lo que es darle a la bici poco vamos a darle.

 

Y digo que ayer casi casi, porque tras varias dudas a la salida sobre si seguir plegando la oreja en la cama o no, salimos varios compañeros del Club, junto con Rubén y Ángel que venía de la Normandía con ganas de darle caña a su TMR01 (por cierto, qué bonita le ha quedado). Tras cuatro pinchazos desde el punto de salida hasta la Universidad de San Jorge y un cada vez más fuerte viento lateral, la gente decidió dar media vuelta y arrear hasta Zaragoza (algunos aún alargaron hasta Muel).

 

Rubén, Ángel y yo con cuatro compañeros más que fuimos recogiendo (a la postre se quedaron por los mismos motivos que antes en sólo dos...), nos dirigimos hasta Ontinar para degustar unas "porras" con coca cola (algunos café) que gracias a Dios reconfortaron mis piernas para aguantar la vuelta que me tenían reservada estos dos pura sangre del llaneo. Sí, sí el lector ha leído bien, nos comimos unas "porras" que Ángel tuvo a bien regalarnos con una pequeña historia personal que confirmaba la creencia de que donde esté un buen almuerzo que se quiten las barritas energéticas.

 

Y así fue... 36km/h de media de bajada de Ontinar a Zaragoza. Ángel y Rubén tirando de sus BMC y aquí el que habla tras dos dos relevos (o tres, ya no recuerdo), se dejó caer para llegar a rueda a unas cómodas 165pp (buffff).

 

Empiezo a pensar que mi TMR01 me la han dado "capada" jajajajaa.

 

Ya de vuelta nos encontramos con Jorge (Cera), con quien tomamos un cafecillo para que nos contara una pequeña locura que tiene en la cabeza, Laponia - Zaragoza. Un tío grande donde los haya, buena gente y que como él mismo dice, que disfruta de la bici en toda su extensión. Un crack.

 

Hoy como digo más arriba ha tocado día "casero", de descanso y relax que también viene muy bien.

 

Un abrazo a todos y buen comienzo de semana.

 

Toño